Elixir d'Espill i vampir

El otro día, Dèbora tenia sobre el mostrador de Casanova un libro muy interesante de Joan Fontcuberta titulado El beso de Judas.

De él Había fotocopiado un capítulo que hace tiempo había leído y cuyo titulo es Elogio del vampiro.

En este apartado, Fontcuberta compara la obra fotográfica de Diane Arbus y Cindy Sherman y utiliza, para ello, dos metáforas muy potentes y queridas, la del espejo y la del vampiro, como medio para diferenciar el posicionamiento ideológico de ambas autoras.

Del texto Extraigo el siguiente fragmento :

"... el trasfondo epistemologico de ambas actitudes ( Arbus/Sherman) separa las modalidades de dialogo con el espejo y acentúa el divorcio entre dos modelos de lo Fotografiable y, por extensión, de lo real. Para Arbus la cámara es un
instrumento de análisis y crítica, y esto se fundamenta en un esquema que presupone la doble existencia, por un lado, de un sujeto que observa y, por el otro, de una alteridad -la sociedad- que es observada. El lenguaje -la fotografía- establece el puente entre objeto y sujeto. Para Sherman, en cambio, no puede darse tal distinción: somos aquello que los media determinan, somos un producto cultural, somos lenguaje. Para Arbus lo real son los hechos y las cosas tangibles, el mundo físico que interactúa con nuestro yo pero del que se es totalmente independiente. En contraposición, para la lógica cínica del
vampiro, la realidad es solo un efecto de construccion cultural e ideológica que no preexiste a nuestra experiencia. Fotografiar, en suma, constituye una forma de reinventar lo real, de extraer lo invisible del espejo y de revelarlo."

Yo me encuentro, de hecho, entre ambas posiciones. Considero la cámara un instrumento de análisis pero me gusta creer que con las foros reintento la realidad de la memoria y el recuerdo.